Hace unos meses, ya tratábamos en otro post que Google haría todo lo posible por conseguir que la autoridad de los usuarios fuera determinante en los resultados de búsqueda.
En un reciente vídeo, Matt Cutts habla de que el algoritmo de Google pretende otorgar mejores posiciones a aquellos sitios que sean considerados una eminencia en “temas concretos”.
Autoridad vs. Popularidad
Como ya hemos dicho, Cutts ya ha hablado de la autoridad pero, ¿es la autoridad lo mismo que popularidad?
El jefe del equipo anti-spam ha querido reflejar la diferencia entre la autoridad de un sitio y la popularidad comparando las páginas pornográficas y las páginas de los gobiernos. “Si atendemos a popularidad, está claro que las páginas pornográficas son más populares, pero nadie enlaza a las mismas. Sin embargo, todo el mundo enlaza a las páginas de los gobiernos”, ha destacado Cutts. Dicho de otro modo, el Page Rank no está vinculado a la popularidad.
Ahora bien, desde Google se ha dejado entrever en numerosas ocasiones en las “señales sociales” que van a modificar los resultados de búsqueda. Aquí la veda se abre para determinar si un sitio se hace popular mediante las redes sociales por su popularidad o su autoridad.
¿Qué hacemos con el ‘guest blogging’?
Cutts remarca que una de las señales de que un sitio tenga autoridad o popularidad esté en el texto ancla de sus enlaces y la temática del blog. Un aspecto importante sobre el posicionamiento SEO y que últimamente está dando quebraderos de cabeza a los profesionales del marketing digital es la conveniencia o no de actuar como blogger invitado. Esta postura de Google no está del todo clara, como se puede ver en la polémica entre el propio Cutts y el SEO DocSheldon.
Las dudas que quedan con todo esto es: ¿y cómo sabemos que el blog en el que escribimos como invitados es exactamente de la temática adecuada? ¿Y si un blog no trata un tema específico como sucede con muchos blogs personales?
Hasta que el motor de búsqueda no emita un mensaje claro de todo esto, la única teoría plausible es que las decisiones de Google son arbitrarias.
